Un grupo de científicos de Reino Unido e Israel ha descubierto un nuevo grupo sanguíneo, al que han llamado MAL. Este hallazgo, que resuelve un misterio que llevaba más de 50 años sin respuesta, es un gran paso para entender mejor nuestra sangre.
El increíble viaje de este descubrimiento científico inició en 1972, cuando un análisis de sangre rutinario realizado a una mujer embarazada reveló una inquietante sorpresa. En sus glóbulos rojos faltaba una molécula superficial presente en todos los glóbulos rojos de los grupos sanguíneos hasta entonces conocidos. Hubo que esperar medio siglo para que el desarrollo de la genética pudiese aclarar lo ocurrido.
¿Qué son los grupos sanguíneos y cuál es su importancia?
Los grupos sanguíneos son una clasificación de la sangre humana basada en la presencia o ausencia de ciertas moléculas llamadas antígenos. Dichas moléculas, presentes en la superficie de los glóbulos rojos, actúan como marcadores que permiten identificar los diferentes tipos de sangre.
Cualquier transfusión de sangre entre humanos debe hacerse en base a la compatibilidad de los grupos sanguíneos. Cuando se transfunde de un grupo no compatible a otra persona, el sistema inmunológico del receptor reconoce los antígenos como extraños y ataca los glóbulos rojos. Esto puede generar una reacción transfusional grave y potencialmente mortal.
Generalmente, la clasificación de los grupos sanguíneo emplea el sistema ABO/Rh, que se basa en la presencia o ausencia de tres antígenos. La existencia del antígeno A implica que se trata del grupo sanguíneo A, y otro tanto ocurre con el antígeno B, cuya presencia define al grupo de sangre B. Algunas personas tienen ambos antígenos, por lo que su sangre se cataloga como AB. Y la mayoría de los humanos no presentan ninguno de los antígenos A y B, por lo que quedan en el grupo sanguíneo O.
Por otra parte, la presencia o ausencia del antígeno Rh clasifica al grupo como Rh+ o Rh-, respectivamente. Cabe destacar que la distribución de los grupos sanguíneos ABO/Rh no es uniforme, siendo el grupo AB- el menos común (1%) y el O+ el más común (37%).
Bajo esta clasificación, el grupo O- es el único que carece en su totalidad de antígenos, por lo que puede donar a cualquier grupo: es el donante universal. Por otra parte, el grupo AB- solo puede donar a personas del mismo grupo.
Científicos descubren nuevo grupo sanguíneo
El nuevo grupo sanguíneo MAL está asociado a un antígeno conocido como AnWj, el mismo que fue descubierto en el lejano 1972. El antígeno en cuestión está presente en una proteína de la mielina y de los linfocitos, lo que llevó a los investigadores a llamar al antígeno y al grupo sanguíneo MAL. Se sabe que dicha proteína desempeña un papel fundamental en la estabilidad de las membranas celulares y en el transporte celular.
La comunidad científica tuvo que esperar más de 50 años para identificar el gen que codifica al antígeno AnWj. Quienes lograron este impresionante hallazgo en el campo de la hematología fueron los científicos del NHS Blood and Transplant y la Universidad de Bristol.
El descubrimiento del nuevo grupo sanguíneo MAL tiene importantes implicaciones para la medicina transfusional y el estudio de algunas enfermedades raras de la sangre. Por ejemplo, permite identificar a los donantes y receptores con este grupo sanguíneo, lo que garantizará una mayor seguridad en las transfusiones. También el desarrollo de nuevas terapias para un conjunto de enfermedades hematológicas que se relacionan con la presencia del antígeno AnWj.
Otro aspecto destacable de este descubrimiento es que el hallazgo del grupo sanguíneo MAL demuestra la complejidad del sistema de grupos sanguíneos humanos. Y pone en manifiesto que nuestra principal clasificación actual de los grupos sanguíneos es incompleta y debe ser revisada.