¿Qué me dices si pudieras reciclar todos tus residuos y hacer compost? ¿Y sin que huela mal? Es posible. Se llama compostaje Bokashi.
Vamos a ver cómo funciona este método, y como con otras alternativas como puede ser el vermicompostaje y los compostadores tumbler, puedes tener la opción para que compostar no sea excusa por vivir en un apartamento en el centro de la ciudad.
¿Qué es el compostaje Bokashi y cómo funciona?
El compostaje Bokashi es un proceso que usa la fermentación anaeróbica. Su origen es japonés. A diferencia del compostaje más tradicional que todos conocemos y que se basa en la descomposición aeróbica, es decir, con oxígeno, el Bokashi usa microorganismos para fermentar esos residuos y así, crea un ambiente totalmente libre de oxígeno. Con ello, se consigue evitar la putrefacción y los malos olores. Esto lo hace ser una opción perfecta para apartamentos, donde el espacio es pequeño y los olores… no son fáciles “de digerir”.
El proceso de Bokashi no solo elimina olores, sino que también permite compostar muchos residuos que generalmente no son aptos para el compostaje “de siempre”, como carnes, pescados, lácteos y restos cocinados. El tiempo de fermentación es rápido, tomando entre 2 y 4 semanas, y luego los restos deben mezclarse con tierra para completar el proceso y hacerlos un abono perfecto y sostenible.
¿Por qué no huele a basura?
Todos tenemos en mente que la basura, sea como sea, siempre huele a algo malo. Pero todo es un proceso químico. El secreto detrás de este compostaje sin olor está en la fermentación controlada. Y no, no hablamos de vino. Cuando los residuos se van descomponiendo en un ambiente sin oxígeno, las bacterias “buenas” van descomponiendo los desechos sin producir gases que huelen mal. Además, el uso de un recipiente más hermético asegura que no haya ningún contacto con el aire, así no se pueden desarrollar bacterias que causen malos olores.
Método Bokashi: Paso a paso
- Consigue un balde Bokashi: Primero vas a necesitar un recipiente que sea totalmente hermético con un grifo en la parte de debajo. Así se recolecta esa especie de “té”, un líquido nutritivo que se usa como fertilizante.
- Añade los residuos de cocina: Después has de trocear los residuos, como pueden ser cáscaras de fruta, pan, arroz, etc. Agrega una capa de salvado Bokashi con microorganismos entre cada capa de residuos.
- Fermentación: Cierra bien el balde y deja que los residuos se fermenten durante 2 a 4 semanas. Durante este tiempo, los microorganismos transforman los desechos en una «pre-composta» y sin que huela tan mal como lo hace de manera normal.
- Curado en tierra: Una vez que los residuos han fermentado, saca el contenido del balde y mézclalo con tierra. Déjalo reposar durante al menos 2 semanas más para que se complete la descomposición y esté listo y preparado para usarse como un fertilizante ecológico y perfecto, ya que no huele.
Otras técnicas de compostaje en apartamentos
Aunque el Bokashi es ideal para espacios pequeños y sin olores, también hay otras opciones para aquellos que prefieren distintos métodos:
- Vermicompostaje con lombrices: Aqui e usan lombrices rojas para hacer que los restos se transformen en humus de lombriz. Es importante mantenerlo en un lugar ventilado y evitar que las lombrices coman más de la cuenta.
- Compostadores Tumbler: Son compostadores totalmente cerrados que giran y que permiten airear los residuos sin necesidad de tocarlos. Al girar el tambor, se optimiza esa descomposición, se controla la humedad y la oxigenación, lo que evita los malos olores. Son una opción limpia para quienes tienen la suerte de tener terraza.
Ahora compostar es más fácil que nunca y no hay ninguna excusa para no hacerlo. ¿Te unes a una nueva forma de vida?